Sinaloa ocupa el segundo lugar nacional en número de empresas señaladas por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos por presuntos vínculos con operaciones de lavado de dinero relacionadas con el crimen organizado, solo detrás de Jalisco.
Una revisión de la lista de la Oficina para el Control de Bienes Extranjeros (OFAC) muestra que en el estado han sido registradas 93 compañías durante los últimos 20 años. Varias de ellas se encuentran inactivas o en declive tras ser bloqueadas por la Unidad de Inteligencia Financiera o investigadas por la Fiscalía General de la República.
Estados con empresas señaladas
En el primer lugar se ubica Jalisco con 161 empresas señaladas, seguido por Sinaloa. Baja California aparece en tercer sitio con 55 negocios, mientras que Ciudad de México y Sonora registran 31 y 27, respectivamente. Otras entidades como Michoacán, Estado de México, Nuevo León y Nayarit tienen menos de 20 razones sociales listadas. Además de las empresas, 101 personas ligadas a presuntos operadores de narcotráfico también han sido fichadas de manera individual.
El gobierno estadounidense comenzó a emitir estas sanciones en 2002, cuando la OFAC incluyó por primera vez a Ismael Zambada García y parte de su familia. Para 2007, varias compañías creadas desde los años 80 fueron catalogadas como posibles vehículos de lavado, entre ellas Establo Puerto Rico, Nueva Industria de Ganaderos y Lechera Santa Mónica, que posteriormente quedaron en ruinas tras el bloqueo de sus cuentas.
Mes con mes, la OFAC suma nuevas entidades acusadas de mover dinero ilícito o de servir como red de suministro de precursores químicos para drogas sintéticas. El 12 de noviembre pasado fueron sancionadas empresas ligadas al grupo Hysa, entre ellas cuatro casinos instalados en Sinaloa —Mirage en Culiacán, y franquicias Midas en Mazatlán, Guamúchil y Los Mochis— además de dos restaurantes asociados.
De acuerdo con el Tesoro, estas operaciones permitieron lavar al menos 2 millones de dólares a favor de integrantes del Cártel de Sinaloa.
Actualización
En octubre también fue actualizada la ficha del laboratorio Sumilab y varias de sus filiales. El comunicado señaló que la compañía, vinculada a la familia Favela López, habría sido utilizada para abastecer precursores destinados a la producción de drogas sintéticas por parte de una facción del grupo criminal. Aunque Sumilab ya había sido sancionada en 2023, realizó ajustes internos que no evitaron el nuevo señalamiento.
A lo largo de casi dos décadas, diversas empresas en Sinaloa —constructoras, gasolineras, tiendas de ropa, guarderías, distribuidoras, transportistas e incluso espacios recreativos— han sido incorporadas a la lista del Tesoro. Muchas de ellas, relacionadas con familias como los Zambada, Cázarez o Esparragoza, fueron abandonadas, demolidas o intervinidas tras el bloqueo de cuentas y permisos.
Pese a estos antecedentes, algunas compañías continúan operando y, en ciertos casos, incluso han obtenido contratos públicos con gobiernos estatales, ayuntamientos o instituciones educativas.





