Un ejercicio de sensibilización sorprendió a funcionarios y regidores del Ayuntamiento de Ahome, quienes participaron en la dinámica “Ponte en mi lugar”, una caminata diseñada para experimentar las dificultades cotidianas que enfrentan personas con discapacidad en Los Mochis.
La actividad inició en la plazuela 27 de Septiembre y concluyó en el Monumento a la Mujer, un tramo de apenas 150 metros que se convirtió en un desafío inesperado cuando los participantes recibieron sillas de ruedas, andaderas y antifaces para simular limitaciones de movilidad y visión.
Ansiedad, tropiezos y silencio
Antes de comenzar, el director del Instituto Municipal para la Discapacidad (IMDIS), Carlos Martín Valenzuela, advirtió al grupo que vivirían una experiencia cercana a la realidad que miles de personas enfrentan cada día.
Con los antifaces colocados, el ambiente cambió de inmediato: los sonidos de la calle se intensificaron y los asistentes avanzaron con torpeza. La regidora María Esther Robles relató que el bastón que utilizó se atoraba en cada bache, provocándole ansiedad.
“Sentí que podía caerme en cualquier momento”, dijo tras retirar el antifaz.
El regidor Feliciano Castro describió el recorrido como un golpe emocional: “Pierdes la vista, pierdes el color… y te quedas con pura inseguridad”.
Un esfuerzo que duele
Quienes utilizaron silla de ruedas también enfrentaron dificultades. La secretaria de Economía, Carmen Julia Cabrera Zazueta, comentó que avanzó apenas unos metros antes de que el esfuerzo físico la agotara.
“Me ardieron las manos y apenas llevaba media cuadra”, expresó entre sorpresa y cansancio.
Durante el trayecto, algunos participantes enfrentaron situaciones incómodas, como casi caer en un drenaje abierto o escuchar burlas sobre su forma de caminar. La directora de SIPINNA, Gloria Chavarría, señaló que ese momento le hizo comprender el impacto del estigma.
“Sentí lo que siente una persona cuando se burlan de su discapacidad”, lamentó.
El director del IMDA, Pablo García, destacó la fortaleza de las personas con discapacidad que estudian, trabajan y practican deporte de alto rendimiento pese a los obstáculos cotidianos.
La experiencia de la caminata le permitió a los funcionarios reflexionar los infortunios que experimentan las personas con discapacidad.
En el municipio de Ahome viven más de 70 mil personas con discapacidad, una cifra que los participantes dijeron ver ahora con otros ojos.
La actividad concluyó con un llamado a redoblar esfuerzos en materia de accesibilidad y respeto, recordando que la empatía comienza cuando se comprende —aunque sea por instantes— la realidad del otro.





